domingo, 5 de mayo de 2013

Lérida: Valle de Arán (IV) - Unha, Artíes y Garòs


Antes de abandonar este magnífico valle, decidimos hacer nuestra última ruta.

Desde Unha sale un sendero que va a Gessa por el barranco de Corilha.


La ascensión es pronunciada. Rápidamente se coge altura y se tienen unas vistas espectaculares del valle, incluso mejores que las que ofrece el mirador de Beret.




Nos sentamos un rato en un primer descansillo que ofrece la ruta para disfrutar de lo que nos rodea.


Cuál fue nuestra sorpresa cuando vimos una pareja de buitres planeando en un nivel inferior a la que nos encontrábamos. Sin un sólo batir de alas, simplemente girando y aprovechando las corrientes de aire, se pusieron a nuestra misma altura para más tarde sobrepasarnos.


Ver a estas grandes aves tan cerca de nosotros nos hizo apreciar realmente su envergadura. Fue un espectáculo precioso.

Proseguimos la dura subida hasta llegar al punto más alto.

La bajada es tan pronunciada como la subida. Comenzamos a oír el sonido de cencerros y en seguida vimos un rebaño de ovejas que pastaban a ambos lados del sendero.


Al vernos acercarnos se iban bajando un poco para tener una distancia prudencial respecto a nosotros. En el rebaño había un montón de corderos, algunos no debían tener más de un par de semanas. Las niñas estaban entusiasmadas.

Seguimos bajando. Por el camino pudimos ver mechones de lana enredados en las ramas de los arbustos.

Comenzamos a oír agua. Bajaba un río de este líquido elemento que perforaba, construyendo túneles, la nieve que aún se encontraba en una hondonada.





















Continuamos bajando hasta llegar a la orilla del río donde la bajada se hace mucho más suave y conduce hacia Gessa.

El regreso a Unha es a través de un sendero que discurre entre pastos plagados de vacas, caballos y más ovejas. Es bastante llano, así que resulta muy sencillo.

A la derecha Salardù y a la izquierda Unha




De regreso en Unha comemos una hamburguesa de buey y nos disponemos a visitar la iglesia que posee pinturas románicas. Pero finalmente no podemos hacerlo, la iglesia está cerrada y hasta las cinco no abren el museo de la nieve para poder preguntar si nos pueden abrir la iglesia.

Unha

Finalmente nos vamos a visitar Artíes y Garós.

Mazorcas de maíz en Artíes

Creo que el campanario de Santa María de Artíes es el más bonito de todos los que hemos visto.

Artíes

Garós es un pueblo muy coqueto y cuidado que bien merece la pena un paseo.

Garòs

Ya de aquí hacia Madrid. Pero debo dar un par de recomendación:

     - Aunque la casa en la que estuvimos es una preciosidad y no le falta de nada, es mejor estar más centrado en el valle: Vielha, Encunhau, Garós...
     - Pienso que la mejor época para hacer senderismo por el Valle de Arán debe ser a partir de finales de Junio ya que los árboles estarán ya vestidos con sus hojas y las praderas habrán recuperado su verde intenso perdido tras la abrasión de la nieve.

Nos han quedado rutas pendientes, así que volveremos.


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